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Mario Tama / Getty Images
Durante el fin de semana se produjo un dantesco acontecimiento en el que es considerado el campamento para personas sin techo de mayor magnitud en Phoenix, Arizona.
Un reporte de la policía señala que cerca de la 1 am del sábado, se recibió una llamada telefónica solicitando apoyo para un niño, quien presuntamente estaba siendo atacado al oeste del centro de la ciudad de Arizona, donde se ubica la concentración más grande de personas sin hogar de toda la ciudad.
Al arribar al punto señalado, una pareja de oficiales encontró en muy malas condiciones un feto con una edad gestacional estimada de entre 20 y 24 semanas.
Al respecto, Joel Coplin, quien vive cerca del punto donde se descubrió el macabro hallazgo, describió la escena como “absolutamente horrible”.
“Al principio pensaron que era una muñeca, pero no lo era”, explicó durante una entrevista concedida al canal de televisión KPNX-TV.
El individuo señaló que otro de sus vecinos, quien caminaba por el lugar en compañía de su novia, a la distancia se percató que alguien le prendió fuego a un objeto tirado en el piso y ante la posibilidad de que eso detonara un incendió se acercó para tratar de apagar la llama.
“Él me dijo que su prometida vino y estaba tratando de apagar el fuego, y luego lo pisoteó para que dejara de arder, entonces se dio cuenta de que había un bebé allí. Vio una cabeza de forma perfecta, pequeños brazos, manos, piernas y pecho, así que agarró a su prometida y se dio la vuelta para que ella no lo observara, estaba asustado. Después, llamó al 911″, describió.
A partir de ese momento, las autoridades abrieron una investigación para tratar de descubrir la identidad de la mujer que engendró al feto y al responsable de prenderle fuego.
Mientras tanto, la Oficina del Médico Forense del Condado de Maricopa realiza los servicios periciales para determinar la causa de la muerte de la criatura en proceso de gestación.
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