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Durante una conversación telefónica sostenida con Volodímir Zelenski, presidente de Ucrania, bajo el argumento de lograr frenar la guerra, Narendra Modi, primer ministro de la India, le recomendó el cese inmediato de hostilidades en contra de Rusia.
“Deben volver al diálogo y la diplomacia para encontrar una solución duradera a sus diferencias”, señaló el funcionario.
De acuerdo con un comunicado emitido por la oficina del primer ministro, la India “continuará brindando asistencia humanitaria a la población civil afectada”.
Al parecer, Modi y Zelenski también se dieron un espacio para analizar las “oportunidades para fortalecer la cooperación bilateral”.
“Fue en esta plataforma que anuncié la fórmula de la paz y ahora cuento con la participación de India en su implementación”, indicó Zelenski mediante un mensaje publicado Twitter, donde también le agradeció por el apoyo humanitario y el respaldo de Modi ante Naciones Unidas.
Cabe mencionar que el mes pasado, el mandatario ucraniano le solicitó al Grupo de las 20 principales economías que adoptaran la fórmula de paz de 10 puntos de su país y pusieran fin a la guerra.
Es de llamar la atención que, desde el inicio del conflicto bélico entre Rusia y Ucrania, el gobierno hindú ha mantenido una posición neutral, esto pese a que varios países occidentales han presionado para definir el bando en que se ubica, pues en realidad comercialmente la India tiene alianzas importantes con el gobierno encabezado por Vladimir Putin, quien regularmente le surte de petróleo y gas, esto sin contar con una lista de más de 500 productos que además incluyen piezas para automóviles, aviones y trenes.
Por ello, durante los primeros días de diciembre, el propio Modi también entabló una conversación telefónica con el responsable del Kremlin para recomendarle el empleo de la diplomacia para poner fin al conflicto en Ucrania, algo que de lograrse beneficiaría a todo el mundo, pues mantener abierta la guerra implica la imposibilidad de mover cientos de productos que se producen en ambos países, además de la amenaza vigente de que el conflicto bélico pueda escalar a niveles donde otras naciones se vean obligadas a intervenir.
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