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Doce estados gobernados por demócratas han demandado a la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) para tratar de levantar restricciones federales impuestas a la distribución de la píldora abortiva mifepristona.
En la demanda, alegan que esas restricciones no están respaldadas por evidencia y las opciones para un aborto seguro se han vuelto limitadas en todo el país desde que la Corte Suprema anuló Roe vs Wade y con esto, la protección federal del derecho al aborto.
La demanda, encabezada por los estados de Washington y Oregon, se presentó el jueves en un tribunal federal de Yakima, Washington, y tiene como objetivo ampliar el acceso a la mifepristona al permitir que cualquier médico o farmacia la recete y la dispense, como la mayoría de los medicamentos. Actualmente, los médicos que recetan mifepristona y las farmacias que la dispensan deben obtener una certificación especial.
La demanda presentada en un tribunal federal, representa a los estados de Washington, Oregon, Arizona, Colorado, Connecticut, Delaware, Illinois, Michigan, Nevada, Nuevo México, Rhode Island y Vermont.
Mientras tanto, Texas encabeza una demanda por separado presentada por activistas contra el aborto que busca terminar con el acceso a la droga.
El fiscal general del estado de Washington, Bob Ferguson, dijo que está demandando a la Administración de Drogas y Alimentos (FDA) porque las restricciones sobre el medicamento abortivo mifepristona son “totalmente irrazonables y médicamente innecesarias”.
Ferguson, quien habló con All Things Considered de NPR el sábado, es uno de los 12 fiscales generales demócratas que presentaron la demanda acusando a la agencia federal de regular excesivamente la droga.
La mifepristona generalmente se usa en combinación con misoprostol para inducir el aborto en el primer trimestre. Ferguson dice que es uno de solo 60 medicamentos, de más de 20,000 medicamentos aprobados por la FDA, que tiene restricciones adicionales que hacen que el medicamento sea difícil de recetar y dispensar.
Pero aunque el misoprostol está disponible gratuitamente, la FDA controla estrictamente quién puede recetar y dispensar mifepristona.
El aborto con medicamentos representa más de la mitad de los abortos en Estados Unidos.
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