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Los temores de una recesión siguen al margen de la economía de Estados Unidos, que mantuvo su ritmo de crecimiento al 1.1% en su Producto Interno Bruto (PIB) durante el primer trimestre del año, según un reporte del Departamento de Comercio.
Aunque el PIB sumó su tercer trimestre con crecimiento, el dato mostró en los primeros meses del 2023 un desgaste y desaceleración, principalmente provocada por las tasas más altas.
Pero es el gasto de los consumidores el que, a pesar de los precios altos, mantiene la recesión al margen de la economía nacional y los temores de que finalmente se paralice.
Aun así, el reporte del PIB envía una señal a la Reserva Federal (Fed) de que su estrategia de tasas para controlar la inflación, finalmente, muestra resultados, con un enfriamiento de la economía.
El dato del primer trimestre del año muestra una caída desde el 2.6% que el Departamento de Comercio informó para el cuatro trimestre del 2022.
No obstante, los analistas destacan que se trata del tercer trimestre consecutivo de crecimiento, luego de que la economía estuvo al borde de una recesión durante la primera mitad del 2022.
Las tasas de interés lastran el crecimiento del PIB
Cuando la Fed comenzó con su estrategia de alza de tasas para controlar la inflación a principios de 2022, advirtió que los efectos reales se verían en el largo plazo.
Esos efectos han comenzado a notarse en los indicadores macroeconómicos, con una inflación que ha comenzado a ceder y que se ubicó en el 5.0% en marzo pasado en su medición anual, y reportes del mercado laboral con menos puestos nuevos creados.
En cuanto al PIB, el crecimiento del primer trimestre fue afectado por la debilidad en la inversión en el mercado de vivienda y en los negocios en general, ambos fuertemente afectados por las tasas de interés, según un reporte de The New York Times.
Aunque la Fed ha dado una dura batalla con su mejor recurso que es su tasa de interés clave, los consumidores han mostrado una resiliencia sorprendente en medio de un escenario de altos precios y temores de recesión.
Según el reporte del Departamento de Comercio, el gasto ajustado a la inflación creció a una tasa anual de 3.7% durante los primeros tres meses del año, desde el 1% del trimestre previo.
Por sectores, el gasto en servicios aéreos y en restaurantes siguió en un rumbo de recuperación desde que ambos sectores se desplomaron en la pandemia.
Y un dato que sorprendió fue el del gasto en bienes, que en el primer trimestre de 2023 mostró nuevamente una recuperación, luego de un año de caídas consecutivas.
Aunque los datos del primer trimestre son positivos en un escenario general, los analistas advierten que la desaceleración que el PIB mostró podría continuar para los trimestres que vienen de 2023, lo que mantiene encendida la alerta de una posible recesión.
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