Arturo Ceja III se declaró culpable el año pasado en una corte federal de Los Ángeles por transportar explosivos sin licencia y que provocó una explosión masiva que hirió a 17 personas y familias desplazadas debido a la detonación fallida, por lo que fue sentenciado a cinco meses en una prisión federal.
Ceja planeó vender los fuegos artificiales en todo el vecindario para celebrar el feriado del 4 de julio en 2021, según la Oficina del Fiscal Federal. Hizo varios viajes a Nevada a fines de junio de 2021 para comprar varios tipos de explosivos, incluidas exhibiciones aéreas y grandes fuegos artificiales caseros que contenían materiales explosivos, que transportó a su casa en camionetas de alquiler, según muestran los registros judiciales.
Posteriormente, los fuegos artificiales fueron incautados y detonados en el vecindario el 30 de junio de 2021 por el Departamento de Policía de Los Ángeles, sin embargo, el plan no salió como esperaban.
El tanque, clasificado para contener 33 libras de explosivos, estaba cargado con 39.8 libras de material, según encontraron los investigadores de la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos de EE.UU.
Cuando finalmente se detonaron los materiales, los resultados fueron catastróficos.
Los cimientos se agrietaron, las ventanas se rompieron y más de una docena de personas sufrieron lesiones, incluidos cortes y pérdida de audición. Más de 30 propiedades resultaron dañadas y más de 80 residentes fueron desplazados.
En total, 17 residentes y decenas de personas fueron desplazadas y algunas nunca han regresado al barrio.
Así, Arturo Ceja III recibió una condena de cinco meses de prisión y se le ordenó cumplir dos años bajo libertad supervisada después de salir de la cárcel.
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